Aunque hayan sido unas Navidades extrañas, los excesos se cuelan por cualquier resquicio que encuentran. Así, quizás hayas tenido un extra de alcohol, de azúcar, de hidratos. O de todo a la vez. Para estas ocasiones, elaborar una buena secuencia en la que las torsiones sean protagonistas es una opción extraordinaria. Tu cuerpo te lo va a agradecer.
La secuencia que te propongo en este post se centra en darle especial atención a nuestro sistema digestivo para ayudarle en el proceso depurativo que le va a tocar emprender.
Las torsiones son las reinas de cualquier propuesta detox. La compresión de los órganos internos, les da un masaje que les ayuda en su movilidad muscular y les aporta un extra de irrigación sanguínea. Y ya sabes lo que se dice... "donde hay sangre, hay vida" así que... a por ello.
Si te fijas, incidimos en el trabajo en la zona abdominal Es especialmente interesante la postura número 5, una versión de Mandukasana, en la que te propongo introducir los puños en la zona abdominal respirando profundamente (no retengas la respiración aquí). La primera vez que haces esta postura cuesta un poco. La segunda (te propongo que en esta secuencia la practiques dos veces), ya no es tan exigente. Los beneficios son interesantes. Se estimula la zona del páncreas por lo que es oportuna si padeces de diabetes. Notarás que te cuesta un poco respirar. No te asustes, es normal. Es por la posición del diafragma en la postura. Gracias a ese esfuerzo extra que vas a tener que hacer para coger aire, la circulación sanguínea mejora alrededor del corazón y el pecho.
¿Sabías que estas posturas son estupendas para bajar abdomen?
¿Cómo hacer bien una torsión?
Si quieres obtener los máximos beneficios de esta secuencia vas a tener que hacer el trabajo propuesto despacito y con consciencia. Si quieres sacarle el máximo rendimiento deberás componerla con detalle y atención.
No sé si te sonará raro, pero una torsíón no es un giro. . Lo primero es elongar la columna vertebral en su totalidad. Tienes que sentir cómo tus vértebras van ganando espacio entre ellas y, respetando las curvas naturales de la columna, en general estás más erguida. Lo segundo es comenzar a torsionar desde la zona lumbar. Si no las incluyes en la torsión, las lumbares se enfadan, y luego te molestarán. Así que ve poco a poco, empezando desde allí, y ¡cuidado!, no desalinees tus caderas. Observa al maestro Iyengar. ¿Entiendes ahora porqué es tan saludable el hacer torsiones para los órganos internos?
Una torsión en detalle: Parivrtta Parsvatonasana
¿Para qué es buena esta postura? Como estamos centradas en el objetivo detox, esta postura nos va a ayudar en el caso de
tener malas digestiones
estreñimiento
retención de líquido
gases
y sí, también para bajar el abdomen
¡Casi nada! Implicaciones anatómicas
Los músculos abdominales oblicuos trabajan intensamente
Aductores
El glúteo medio funciona como estabilizador de la postura (préstale atención)
El erector de la columna (sensacional para ayudarte luego mantenerte erguida)
Precaución
Cuida tu cuello si te duelen cervicales
Focaliza la mirada (dristhi) para evitar caídas o inestabilidad
Si estás embarazada no es una postura adecuada para ti
Y SOBRE TODO, HAGAS LO QUE HAGAS, ¡¡NO LO HAGAS ASÍ!!
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